Así me siento, viajando tomando nuevos rumbos en caminos desconocidos. Abriéndome paso como una niña pequeña que necesita aun que la sujeten para no caer, pero con la ardiente curiosidad dominando todos sus sentidos para poder avanzar...
Hace mucho que no escribo de mi, ya casi se me ha olvidado como redactarme a mi misma.
Yo a veces me siento como un árbol, cuyas ramas intentan crecer hasta el cielo, bailar con el viento y desnudarse cuando llega el Otoño. Así quiero, que mis hojas caducas se caigan y que un nuevo ciclo renueve lo que me cubre y adorna. Ahora siento mis raíces nutriéndome mejor, tengo más contacto con la tierra en la que habito...
En cuanto a este blog... ¿Para que?...quien sabe...
---Quizás para que partes de mi no mueran en la rutina de cada día....
---Quizás para sentirme escuchada, al menos por mi misma, al tener que expresarme por escrito...
---Quizás para que algo de lo que yo escriba acompañe al que lo lea...
Yo Yo también a veces necesito que me acompañen.
Osho decía; Reprime cualquier cosa y se volverá valiosa. Reprímela más y se volverá más valiosa. No la reprimas y perderá su valor. Exprésala y se evaporará.
Eso espero, que algunas cosas que me guardo se evaporen.
Buen viaje....
